Locales

El problema de la salud mental y sus implicancias en nuestro mundo cotidiano

El problema de la ansiedad como fenómeno transversal
En "La modernidad Líquida" (2000), el sociólogo Zygmun Bauman sotiene que: "La ansiedad es la emoción dominante en la sociedad líquida, ya que la incertidumbre y el riesgo son constantes". Con ello, describe de alguna manera aquellas angustias propias del nuevo siglo, haciendo énfasis en lo cambiante y efímero de una realidad social que alimenta constantemente el desarrollo individual por sobre el colectivo. En este sentido, es muy difícil no cruzar esta mirada con el fenómeno que implicó la pandemia y sus consecuencias más trasendentes dentro de la sociedad en su conjunto; sobre todo cuando esas huellas quedan materializadas en la invisibilidad de los flagelos vinculados a la salud mental.
En relación a ello, ansiedad y depresión aparecen como los trastornos más comunes dentro de los distintos campos del espectro social, alcanzando distintas formas y maneras de manifestarse. Según la licenciada López: "Es cierto que en los últimos años hay una visibilidad mayor de estos trastornos de ansiedad y depresión, debido a que afectan a una gran parte de la población. Estos trastornos, adoptan muchas formas y maneras de manifestarse en un contexto que constantemente apela al consumo de lo inmediato, de lo urgente. El mundo de las redes sociales fomenta la búsqueda del placer inmediato, apelando a la construcción de una imagen de éxito y visibilidad de 'la mejor parte' de la vida de cada uno. Todo este escenario, contribuye a generar presiones sobre las expectativas cotidianas de las personas, facilitando la emergencia de estos trastornos desde edades muy tempranas. No sé si podría hablarse de una pandemia de salud mental, pero de lo que estoy segura es que el número de casos problemáticos ha aumentado y además, se habla cada vez más de estos trastornos". De esta manera, la emergencia de estos trastornos aparece vinculada a una forma de consumo propia de esta sociedad líquida que nos plantea Bauman: la relación entre el placer inmediato y el miedo a la incertidumbre. Según su mirada "La búsqueda de placer inmediato es una forma de evitar la ansiedad y la incertidumbre, pero también es una fuente de insatisfacción y descontento", y esto sucede porque la sociedad consumidora fomenta la idea de que el placer inmediato es la mejor forma de evitar la ansiedad frente a lo desconocido. No es casualidad que, tal como señala López, esos recortes de la vida cotidiana en manos de las redes sociales tengan la posibilidad de florecer en un contexto social donde la búsqueda por generar seguridad personal es una constante. De acuerdo con la Licenciada "Todo lo vinculado a dispositivos electrónicos, redes sociales y demás, influyen en la ansiedad de las personas porque existe una exigencia por mostrar escenarios exitosos y al mismo tiempo, ocultar todo lo que no cumpla con esos estándares de una vida perfecta. Cuando observamos estas situaciones desde afuera, es notable la presencia de una idealización de cómo debería ser una persona feliz, una familia perfecta, un cuerpo perfecto; generando una sensación de lo inalcanzable. Estos estándares son justamente imposibles de alcanzar porque no son la realidad, son un recorte de lo que las personas eligen mostrar. Son situaciones que aparecen en edades cada vez más tempranas, instalando una idea de lo que debería ser una vida ideal que básicamente no existe".
Cuando pensamos en el universo tecnológico que fomenta todos estos hábitos de consumo efímero, aparece la utilización de dispositivos móviles como la punta de lanza del nuevo paradigma. Sobre sus usos y regulaciones en espacios educativos, López sostuvo que: "Es un escenario de análisis y estudio constante. Si bien hay países donde se han incorporado como herramientas para estudiar, la realidad es que también se dan de baja cuando se detectan las consecuencias negativas que tienen para el sostenimiento de la concentración y atención en las clases; la pérdida de estímulos por la falta de interacción con otras personas y demás. Por ello, es importante marcar que el uso indiscriminado en todo momento y todo lugar no es positivo para nadie. Lo más difícil es encontrar ese equilibrio, sobre todo cuando vemos que todo el tiempo aparecen recomendaciones de tiempo de uso en niños y adolescentes; sin plantearnos cuantas horas nos pasamos los adultos utilizando el celular. Hay que trabajar en esa adicción a los dispositivos móviles por parte de los adultos, generando conciencia sobre la cantidad tiempo y la multiplicidad de espacios donde los utilizamos normalmente".
Por otro lado, otro de los flagelos que se desprenden de este escenario tiene que ver con el consumo problemático de apuestas online en adolescentes y los cambios en el mundo laboral pos pandemia. En relación al problema de ludopatía en jóvenes, López sostuvo que: "Es un tema realmente preocupante porque afecta directamente a las adolescencias debido a que están constantemente con el celular y muchas veces, a espaldas de los padres. Es una problemática difícil para manejar por los adultos ya que es muy complejo estar al tanto de lo que pasa mientras el problema está en crecimiento. Además, las acciones que pueden emprenderse desde los sistemas de salud tienen la complejidad de que muchas personas no tienen acceso a esa atención. Aunque existen excelentes profesionales (tanto en el ámbito público como privado) capaces de atender esta problemática, la clave es intervenir a tiempo y no sólo cuando las consecuencias de estos episodios de ludopatía se vuelven un problema mayor".
Por último, el mundo del trabajo también refleja la emergencia de estos trastornos de salud mental. En este caso, las principales transformaciones se ubicaron en los cambios de modalidad propios de la pos pandemia, donde distintas estructuras sociales (aquellas que generan seguridad, confort y control), fueron puestas en jaque por un sistema que vio la necesidad de mutar. En este sentido, López sostuvo que: "Dentro del ámbito terapéutico, es común seguir tratando los aspectos traumáticos de la experiencia pos pandémica. Entre los casos más frecuentes aparecen las personas que han padecido el encierro, la pérdida de seres queridos, dificultades económicas e incluso, cambios en lo vincular. En lo que respecta al campo laboral, puedo afirmar que el cambio más significativo que encuentro tiene que ver con la transformación radical en la modalidad de trabajo. Si bien el reemplazo de lo presencial por lo remoto ha posibilitado un alcance mayor de posibilidades laborales, entiendo que ha resultado negativo para la realidad de muchas personas que viven solas y terminan estando todo el día en su casa, sin sostener vínculos prácticamente en ningún momento; como así también, personas que viven con sus familias y les resulta estresante tener que organizar nuevamente toda una estructura cotidiana para poder llevar adelante sus actividades laborales".

Impacto social locales

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