Militante, dirigentes del partido, colaboradores, sindicalistas y demás allegados estuvieron presente durante la tarde de este jueves en el Sindicato de la Carne para celebrar un nuevo día de la "Lealtad Peronista", una fecha emblemática que marcó un punto de inflexión dentro de la política y en la historia del partido Justicialista.

Como cada año en nuestra ciudad, se llevó adelante un acto, que debido a las condiciones climáticas no pudo desarrollarse frente al busto del general Perón que se encuentra sobre Av. Roca, por lo que tuvo lugar en el mencionado sindicato. El evento estuvo encabezado por el actual secretario general del Consejo Ejecutivo del PJ. Dpto. Castellanos, Dr. Andrés Brarda, quien estuvo acompañado por el Secretario General de la CGT Rafaela, Roberto Oesquer.

Al momento de tomar la palabra, Brarda realizó un repaso histórico sobre el hito que significó, no solo este día en particular, sino toda la gestión realizada por Perón desde sus inicios, donde recordó como en plena dictadura se hizo cargo de una secretaría que él mismo formó para brindar su apoyo a los trabajadores y dirigentes sindicales.

Así mismo el doctor enfatizó el rol de Perón en aquellos años, quien logró imprescindibles conquistas con un claro enfoque social beneficiando a los trabajadores, "es así que aquellos que llegaban a Buenos Aires sabían que en la secretaría de trabajo había un coronel laboralista que los atendía, que los escuchaba y miraba. Esto empezó a envalentonar a los trabajadores que empezaron a mirarlo a los ojos a los patrones y esta actitud no le gustó a los sectores del poder", comentó.

Brarda recordó lo que significó la detención del Coronel, y cómo las clases trabajadoras junto a los gremios se organizaron de forma "espontanea" para brindar un respaldo masivo a quien por entonces se había convertido en su líder.

Tras los acuerdos para su liberación, Perón, como se inscribe en la historia, sale al balcón y da su famoso discurso que "lejos de promover la violencia, fue un hombre pacífico que tranquilizó a los trabajadores, le agradece y desde ese momento se sella un vínculo inquebrantable entre el General y los trabajadores que aún hoy en día perdura".

"La doctrina Peronista, esa doctrina nacionalista, que pone al trabajador como eje y al trabajo como motor de desarrollo y de la industria argentina. Esa es la doctrina peronista, por eso decimos que Perón no es el pasado".


En el final reconoció que "el peronismo no atrasa", sino que requiere de interpretación, lectura de la historia y sobre todo una actualización a la realidad y a los tiempos que corren.