Héctor "Etín" Ponce presentó su libro "Desde el Alma. Relatos y aforismos desde el pago chico a la aldea global", una obra que habla de la importancia de los encuentros y las experiencias compartidas más allá de las responsabilidades de cada persona.
La literatura, además de ser muy importante, es igualadora, con ella todas las personas tenemos los mismos derechos y posibilidades y nos permite entrar en áreas que tal vez comparten en nuestras vidas diarias.
Así lo piensa y manifestó Héctor "Etín" Ponce en la presentación de su libro "Desde el Alma. Relatos y aforismos desde el pago chico a la aldea global", en nuestra ciudad, días atrás. "A través de la literatura uno puede desarrollar aspectos que habitualmente no desarrollamos en el ámbito laboral, es más creo que a la mayoría de quienes tenemos una determinada responsabilidad –en este caso en el ámbito gremial- la gente nos conoce en función de nuestras responsabilidades pero no nos conoce como personas, entonces el hecho de trabajar en literatura hace que la gente nos conozca cómo somos en la intimidad, cuáles son nuestras miradas, nuestras formas de pensar. Para mí es una muy buena ocasión de reflexionar con la gente que accede a los relatos, cuentos y citas que están en este libro", expresó el escritor y Secretario General de Atilra.
Esta obra literaria, que en primer lugar se presentó el pasado 14 de mayo en la 46ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, es una miscelánea de textos construidos desde la memoria que recorren una infancia y una adolescencia, vistas por el adulto que no oculta (ni se ensaña) con las dificultades vividas en la infancia y la adolescencia, sino que las comprende para relatarlas en su íntegra vitalidad. Esta elección de la voz narrativa que indaga su propio pasado no excluye otros puntos de mira, como el que revive la explotación obrera con "La Forestal" o el que desmenuza las paradójicas peripecias del presente con "Redes sociales". La última sección del libro, compuesta por "Aforismos", deriva entre la heterogeneidad del vivir diario y el soñar despierto.
"Desde el alma…", realización de Editorial Octubre con prólogos a cargo de Felipe Pigna y Alejandro Apo e ilustraciones de los artistas Juan Soto (tapa) y Nando "Tato" Niz (interiores), no fue una publicación pensada, según contó el propio Ponce, sino que luego de intercambiar literatura con distinta gente de distintas partes del país lo instaron para publicar. "Estos textos fueron vistos por el director de editorial Octubre, que es el que me dijo que tenía que publicar y no tuve problema en que se hicieran públicos los relatos a través del libro", indicó.
"Tengo la suerte de que luego de haber leído el material lo prologaran dos personas a las que respeto mucho: Alejandro Apo, que incluso le puso la voz a muchos de estos relatos, y Felipe Pigna. Para mí es motivo de satisfacción porque, que dos personas conocidas desde distintos campos me hayan prologado el libro es una gran satisfacción y orgullo"·, agregó, respecto a quiénes inician el escrito.
En este libro Ponce relata sobre su vida en general, no está centrado en su vida sindical. "Este libro básicamente propone encuentros, que es lo que trato de hacer en el ámbito de mi vida en general. Por supuesto que quienes lean el libro se van a encontrar con relatos de mi vida, de mi infancia en Sunchales y primera infancia en Santiago del Estero, nací en Selva, viví en Lugones, con experiencias maravillosas, con carencias materiales pero con grandes sueños y expectativas. En nuestra familia, más allá de las carencias materiales hemos sido ricos en afecto, por eso también en el texto hay un pensamiento de lo que han sido mis padres y abuelos, a los cuales les debo mucho, el hecho de leer y escribir tiene que ver seguramente con los que ellos nos transmitieron a mí y a mis hermanos desde muy pequeños; y las limitaciones económicas y financieras nunca impidieron que nosotros tratásemos de cultivar el interés, y uno lo que siempre y busca es rodearse de gente sana no solo desde el punto de vista intelectual sino también del espiritual, que es lo que uno percibe; y quienes lean el libro se van a dar cuenta de que las conclusiones pasan por esa cuestión, podemos tener disidencias pero si somos personas nobles y que vivimos con afecto, en algún sitio nos vamos a encontrar; esa es la propuesta de la mayor cantidad de los relatos del libro", detalló.
En tanto, reconoció que no sabe si será la única o la primera de muchas publicaciones. "No tengo ni idea si es un inicio o una vez porque la verdad que yo voy a seguir escribiendo, no sé si publicando pero sí escribiendo porque es algo que me sirve cotidianamente desde el punto de vista de mi formación personal y espiritual. Yo voy a seguir escribiendo, si se publicará alguna otra obra no lo sé pero por lo pronto no puedo dejar de escribir", afirmó, destacando su pasión por la escritura.
En cuanto a este ámbito, contó que sus influencias vienen de todas partes, "me gusta leer de todo: historia, literatura española, el siglo de oro; me gusta la literatura en general. Cuando uno lee empieza a tener una formación propia, entonces no importa lo que uno lee porque a veces tenemos esto de que todos, en mayor o menor medida, tenemos distintos prejuicios, cuando es prejuicioso le pone una limitación a su capacidad intelectual, pero cuando uno tiene la posibilidad de pensar con cabeza propia puede darse el lujo de cualquier autor; puede que haya autores con los cuales yo no coincida con su concepción filosófica pero los admiro cómo escriben, entonces me parece que una cuestión no es limitante como para que uno pueda leer absolutamente todo", expresó.
La parte sindical
Como se indica anteriormente, este libro trata sobre la vida general y la persona en su totalidad, es por eso que si bien no hace hincapié hay fragmentos que tienen que ver con la actividad gremial, la cual forma parte de la vida del sindicalista.
Uno de los relatos en este sentido es "Despidos", donde hay una narración de lo que pasó hace unos años cuando desde la cooperativa Sancor despidieron a 13 valiosos trabajadores un 31 de diciembre, "es un relato de lo que nos pasó a los dirigentes hacia adentro y hacia afuera", dijo Ponce. Otro se llama "Empresa recuperada" y tiene que ver con todas las vivencias que tuvieron desde la organización para poner nuevamente en marcha una empresa que había sido cerrada.
"En esos dos relatos hay una experiencia vívida de lo que nos pasó desde nuestra organización sindical hacia adentro. Son como toda experiencia. Con experiencia vivimos momentos de mucha dureza pero que también paralelamente nos han dejado muchas cosas, si es que uno sabe aprovechar esas experiencias que ha tenido. Por lo menos recuerdo que en esos dos relatos se condensa un poco todo lo que no ha pasado en este tiempo", concluyó Etín Ponce.