Desde ayer al mediodía y hasta las 12 de hoy sábado, pilotos y trabajadores aeronáuticos de la Asociación Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) continúan con la huelga de 24 horas en Aeroparque y Ezeiza, afectando a más de 37.000 pasajeros y 319 vuelos afectados.
Se trata del paro más extenso en lo que va de la gestión de Javier Milei. Los sindicatos reclaman un aumento salarial de al menos 25%, cuando la administración libertaria ofrece 11%.
Mientras tanto, el Gobierno insiste con su plan de privatizar la empresa aunque todavía no tiene el aval del Congreso.
Como si fuera poco, al paro de Aerolíneas se suma una protesta de Intercargo, que brinda servicios de rampa. Así también se ven perjudicados los pasajeros que hayan comprado tickets con las low cost Flybondi o JetSmart. La primera de estas compañías trasladó todas sus operaciones a Ezeiza, por lo menos hasta el mediodía, ya que allí no dependen de Intercargo.
En el sector de embarque de Aerolíneas Argentinas, los trabajadores permanecen sentados en sus puestos, bajo los carteles que anuncian la continuidad de la huelga. La quietud es palpable, en contraste con el ajetreo habitual. Por otro lado, en esta terminal JetSmart sigue operando con normalidad y sus filas de pasajeros llenan un aeropuerto donde gran parte de los vuelos están cancelados.
Fuente: NA