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Con 60 mil espectadores, la ciudad tuvo el movimiento más importante del año

Luego de varios meses de preparación, con un buen marco de público y con varios partidos, a mediados de agosto se desarrolló una nueva edición del Torneo "Sueño Celeste", la competencia de fútbol infantil que organiza Atlético de Rafaela y que se ha convertido en un evento de magnitud única en Argentina y Sudamérica. La competencia se llevó a cabo durante 5 días y prácticamente paralizó la ciudad y la zona.
Para esta ocasión el Predio "Tito Bartomioli", emplazado en el Autódromo "Ciudad de Rafaela", tuvo a disposición 23 canchas para la disputa de más de 850 partidos de 10 categorías. Estuvieron presentes 360 equipos de 120 clubes distintos, con un aproximado de 60.000 espectadores en el predio y la ciudad durante los cinco días de competencias. Además, se vendieron cerca de 24.000 entradas.
Las categorías que participaron fueron 2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015 y 2016/17 en Varones, mientras que las Damas competirán en Sub 12 y Sub 10. Los horarios de las jornadas son los siguientes:
Una vez más participaron en este torneo los cinco denominados "clubes grandes": River, Boca, Independiente, Racing y San Lorenzo. Además, visitaron la ciudad instituciones de 18 provincias y el Torneo volvió a tener carácter internacional gracias a los arribos de Nacional, Peñarol, Rentista, Danubio y City Torque de Uruguay, Olimpia de Paraguay, Jorge Wilstermann, Hen Bis, Astor FC y Palo Santo de Bolivia. Y por supuesto, todos los clubes de nuestra ciudad.
"Hay un proceso de trabajo importante para consolidar a Rafaela como ciudad de eventos", decía al respecto el intendente Luis Castellano, quien destacaba además que "planificamos reunirnos y hacer una evaluación con todas las instituciones que trabajamos coordinadamente en el evento 'Sueño Celeste'. No solo el impacto del torneo en sí, sino el impacto turístico en la ciudad. Hubo alrededor de 30.000 personas circulando por Rafaela como consecuencia de este evento. El mismo tiene una expansión muy grande hacia afuera. Esto implicó que Rafaela y la región participe de algo muy importante. Tuvimos ciento por ciento de ocupación hotelera y un alto porcentaje alrededores. Nuestra ciudad, junto a Santiago del Estero y San Luis, en este fin de semana largo, fue de las tres ciudades que tuvieron plena ocupación hotelera en Argentina".
Además, las autoridades confirmaron post torneo que se vendieron más de 21.000 entradas, donde el clima acompañó: "Allí convivieron la kermés que realizó Paseo del Centro y también la Plaza Feria de la Municipalidad de Rafaela. Una cantidad de gente recorriendo nuestro centro y un gran consumo económico para lo que fue gastronomía, kioscos y locales. Les agradezco a todas las personas que han trabajado, y por supuesto al Club que le puso un empeño enorme. Pude recorrer el predio, entregar premios, ver a los chicos y chicas jugando, a las personas del Club, a las instituciones, nuestra gente y equipo trabajando -Diego, Nacho, Alejandra y Myriam-. Fue admirable la voluntad. La evaluación es muy positiva. Por supuesto que hay cosas por mejorar, pero claramente hay un proceso de trabajo importante para consolidar a Rafaela como ciudad de eventos"; concluyó Castellano.
Una evolución constante
El "Sueño Celeste" presenta año tras año claros signos de crecimiento, posicionándose como uno de los eventos más importantes en nuestra ciudad y con alto prestigio a nivel nacional. "En cuanto al crecimiento, satisfacción, sin lugar a dudas. Lo primero que se te viene a la mente es estar satisfecho por lo que uno consigue, lo que consigue este grupo de gente. Por ahí nosotros no tomamos real dimensión de lo que logramos o del evento que terminamos generando y la verdad que después cuando uno escucha determinadas palabras de elogio, de halagos, que cada año hacemos un poquito más, de que todo el tiempo estamos rompiendo récords en cantidad de equipos, en cantidad de partidos, en gente que quiere venir y que llega muy sobre la hora y se quedan sin lugar. La realidad es que nos genera satisfacción y nos genera por lo menos desde mi parte orgullo de pertenecer a esta institución, orgullo de ser parte de este evento y orgullo de ser parte de este equipo de trabajo, que insisto, es bárbaro".
Por último, contó con que expectativas y de qué manera, preparan la próxima edición: "Nosotros todos los años hacemos algo, que es al final del torneo juntarnos, revisar todo lo que fue sucediendo durante este año, 5 días de competencia, ver qué fue todo lo bueno, qué fue todo lo malo, dónde tuvimos alguna crítica constructiva que podemos mejorar y apuntar a eso. Lo bueno nos reconforta, sabemos que nos da fuerzas y ganas de seguir haciendo, de las críticas constructivas es lo que nos permite plantearnos nuevos objetivos y crecer. Yo creo que lo que nosotros necesitamos es seguir por el mismo camino, no resignar ni cantidad ni calidad, si se puede crecer un poquito más, se crece, pero lo más importante es no resignar calidad y seguir dejando a Sueño Celeste bien arriba, con una vara altísima, como uno de los torneos más importantes del país y de Sudamérica. Así que ese es un poco el objetivo, continuar por la senda que venimos, mejorar todo lo que podamos mejorar, pero dejar el nombre de Sueño Celeste y por sobre todo Atlético de Rafaela muy pero muy arriba y mantener la vara tan alta como la venimos manteniendo".

"No tomamos real dimensión de lo que logramos"
Respecto a lo sucedido en el Sueño Celeste en su 26ª edición, CASTELLANOS dialogó con Alejandro Boetto, quien está a cargo de la organización y es integrante de la Subcomisión de Fútbol Infanto - Juvenil.
En primer término, Alejandro brindó un balance general de lo sucedido. "Si bien estamos todavía con la euforia y el cansancio de estar terminando una nueva edición y no nos sentamos a hacer un balance en todo sentido, claramente el balance es sumamente positivo. En la vorágine diaria, fue una edición que tuvo muy pocas falencias, eso obviamente después lo dirá la gente, pero por lo menos no dejamos de recibir buenos comentarios, felicitaciones y las ganas de volver a participar el año que viene, así que sinceramente hoy tengo que decir que el balance es muy positivo".
Por otro lado, contó algunos detalles del arduo trabajo que se realiza permanentemente para la organización de semejante evento: "Es un trabajo mancomunado, es mucha gente, es un grupo sumamente unido. La realidad es que cuando hablamos con muchas de las delegaciones, te preguntan cómo hacemos para hacer estas cosas, cómo podemos llegar a tener este tipo de organización, y la respuesta es siempre la misma: lo hacemos porque somos un grupo de personas que llevamos a Sueño Celeste muy adentro, lo sentimos como propio, y la realidad es que todo eso hace que las cosas sean muy simples. Obviamente que es un trabajo intenso, muchas horas. Nosotros cuando termina esta edición, descansamos unos días y ya pensamos en la siguiente, hacemos balance de lo que hicimos bien y lo que hicimos mal, lo que tenemos que mojar para la que viene. Yo por ahí como referente de la institución no tengo más que palabras de agradecimiento para el grupo de trabajo y el equipo que creo que cualquiera quisiera tener para poder lograr estos objetivos".

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