Cáritas Argentina multiplicó su servicio de ayuda alimentaria en el país, procurando soluciones integrales que mejoren la calidad de los alimentos y la infraestructura de los comedores y merenderos.
"La dura situación económica que atravesamos los argentinos repercute con mucho más crudeza en los sectores más vulnerables, simplemente porque ellos no cuentan con redes de contención o alternativas para salir adelante", advierte en una comunicación.
"Los fuertes aumentos en los precios de artículos de primera necesidad y especialmente en los alimentos, agravaron considerablemente la situación de estos sectores postergados", agrega.
En respuesta a esta emergencia alimentaria, Cáritas Argentina está desplegando un esfuerzo significativo para atender las necesidades más urgentes.
Relevamiento y ayuda que sí llega
A fin de mejorar sus servicios, a partir de febrero de 2024 se realizó un relevamiento de los comedores que acompaña. En la actualidad, Cáritas cuenta con un total de 2.254 centros con servicio alimentario, que atienden a 424.649 personas de bajos recursos. Estos centros incluyen tanto comedores y merenderos, como espacios de distribución de viandas y entrega de bolsones alimentarios en todo el país.
Para sostener esta enorme red de apoyo, Cáritas está haciendo aportes importantes de fondos extraordinarios, lo que conlleva un gran esfuerzo adicional en la búsqueda de distintas fuentes de financiamiento.
Al mismo tiempo, gestiona convenios con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Ministerio de Capital Humano, asegurando un financiamiento para tres meses en la compra de alimentos secos. Esto incluye un convenio nacional para 21 diócesis y 25 convenios diocesanos que llegan en conjunto a 1.215 centros con servicios alimentarios y 180.410 personas.
"Sin embargo, la demanda continúa creciendo y este aspecto de la realidad resalta la magnitud del desafío que tenemos por delante", plantea.
Respuesta Integral de Cáritas Argentina
Como parte integrante de esta tarea de apoyo alimentario, la organización caritativa de la Iglesia procura también implementar soluciones más integrales: "No sólo queremos aumentar la distribución de alimentos, sino también mejorar las infraestructuras y la capacitación de las comunidades".
Por eso, impulsa acciones simultáneas:
-Distribución de Alimentos: "Aumentamos la frecuencia y cantidad de distribución de alimentos en sus comedores y centros comunitarios. Esto es clave para mitigar el impacto inmediato de la crisis en las familias más vulnerables".
-Programas de Capacitación: "Implementamos programas de capacitación en nutrición y manejo de alimentos. Estos programas ayudan a las familias a optimizar el uso de los recursos disponibles y a mejorar su dieta".
-Mejora de Infraestructuras: "Iniciamos trabajos para mejorar la infraestructura de comedores y merenderos, asegurando que estos espacios puedan brindar un servicio con mejores condiciones de salubridad, equipándolos con cocinas industriales, heladeras y freezers".
-Espacios Educativos y Centros de Encuentro y Cuidado Comunitario: Estos espacios son verdaderos centros de referencia y pertenencia para las familias de los barrios más vulnerables. Además de proporcionar alimentos, se ofrecen programas educativos y de capacitación en oficios como herrería, carpintería y electricidad.
-Convenios y Alianzas: "Impulsamos convenios con supermercados para el retiro de alimentos frescos y secos y ha fortalecido alianzas con la Red de Banco de Alimentos y el Banco de Alimentos de Buenos Aires".
El derecho a la alimentación
Cáritas recuerda que "el derecho a la alimentación es una cuestión de justicia, dignidad y salud pública, y garantizarlo es esencial para romper el ciclo de pobreza y malnutrición que afecta a millones de argentinos".
"Desde nuestro enfoque integral y comunitario queremos asumir este desafío, trabajando para que el acceso a alimentos suficientes y nutritivos sea una realidad para la gente de las comunidades", sostiene.
"Nos proponemos no sólo ayudar a aliviar el hambre inmediata, sino también promover la autosuficiencia y fortalecer el tejido social de las comunidades más afectadas", profundiza.