Entre el lunes y el jueves de la semana pasada las petroleras aplicaron un aumento promedio del 12,5% en el precio de sus combustibles. Salvo un cambio de escenario, se espera que los nuevos valores se mantengan congelados hasta el 31 de octubre, pero el incremento de los últimos días obliga a reformular los presupuestos familiares de los automovilistas.
Sin importar el destino, saliendo desde Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) conviene llenar el tanque en casa. Las estaciones de la Capital Federal tienen algunos de los precios más bajos del país, ya que sólo superan a los valores de las bocas de expendio de las provincias del sur: Neuquén, La Pampa, Río Negro, Chubut, Tierra del Fuego y Santa Cruz.
Tomando como referencia los valores de YPF y usando de ejemplo un auto familiar chico con una capacidad de 50 litros, se puede concluir que llenar el tanque con nafta súper ya cuesta $12.025 (se vende a $240,5 por litro).
Si una familia viaja al oeste, tendrá que pagar $14.610 si llena el tanque en Santa Fe (también con nafta súper), $14.743 si carga en Córdoba, $14.130 en San Luis y $13.550 en Mendoza.
Viajando al sur, es conveniente cargar en cualquier provincia desde La Pampa hacia “abajo”. En Tierra del Fuego, por ejemplo, llenar el tanque con nafta súper tiene un costo de $10.635.
Para ir al Norte hay que tener más cuidado, ya que todas las provincias tienen precios más altos que CABA. El caso más extremo es el de Misiones, donde se encuentran los combustibles más caros de todo el país. En las últimas horas, luego del aumento del 12,5% aplicado por todas las petroleras, la nafta súper superó los $300 y ya se deben gastar $15.100 para llenar el tanque en Posadas.
Con los demás combustibles se encuentran brechas similares, dado que todos tuvieron el mismo ajuste promedio. En CABA, cargar 50 litros de nafta premium implica un gasto de $15.435. Si en cambio se trata de un vehículo gasolero, se deben pagar $12.920 por cargar 50 litros de diésel común y $17.635 por el diésel euro.
En la provincia más cara, en Misiones, llenar el tanque con nafta premium ya tiene un costo de $19.105. Por su parte, cargar 50 litros de diésel euro demanda $21.280.
En cambio, en las provincias más económicas, como Tierra del Fuego, cargar el máximo de infinia cuesta $13.590, mientras que llenar tanque de un vehículo diésel cuesta $12.990 con la versión común y $16.970 con la de mayor calidad.
Así, queda claro que salir a la ruta será costoso, pero puede ser mucho más caro en algunas estaciones que en otras. Por supuesto que es posible encontrar precios diferentes en las bocas de expendio ubicadas sobre las rutas nacionales. Los valores mencionados anteriormente corresponden a los surtidores que se encuentran en las grandes ciudades.
En busca de los más económicos
Así como existen brechas superiores al 40% entre los combustibles más baratos y los más caros del país, también existen diferencias considerables entre los destilados de menor y los de mayor calidad.
En CABA, por ejemplo, hay una brecha de 28,3% entre el precio de la nafta súper y la premium y hay una distancia de 36,4% entre las dos versiones de gasoil.
Esa situación, sumada a la pérdida de poder adquisitivo de los salarios, condujo a que miles de argentinos dejaran de cargar las versiones de mayor octanaje para pasar a utilizar las versiones de menor valor.
Según estadísticas de la Secretaría de Energía, en los primeros seis meses del año crecieron 8,9% y 5% las ventas de nafta súper y gasoil común respectivamente. En ese mismo período, los despachos de nafta y gasoil premium cayeron un 1,8% y un 10,9%. Fuente: Infobae.