Alberto Fernández se reunió en Beijing con directivos del Institute of Biological Products-República Popular China para analizar la posibilidad de producir hasta un millón de dosis por semana.
El presidente Alberto Fernández analizó este viernes en Beijing con los directivos del laboratorio que producen la vacuna Sinopharm contra el Coronavirus la marcha de las negociaciones para iniciar la producción local de ese fármaco, con capacidad para ofrecer hasta un millón de dosis por semana, informaron fuentes oficiales.
"Podemos seguir trabajando juntos para ver si podemos transferir la tecnología de Sinopharm para que se pueda producir en la Argentina esa vacuna. Y también ver de qué modo potenciamos el vínculo entre la Argentina y Sinopharm para otros medicamentos", sostuvo el Presidente en la reunión que se realizó de manera virtual por las restricciones vigentes en China por la pandemia de Coronavirus.
En su primer día de visita a China, en el marco de la gira que ya lo llevó a Rusia y luego a Barbados, Fernández mantuvo este viernes un contacto virtual con directivos del laboratorio que produce la vacuna contra el Coronavirus Sinopharm, desarrollada por el Beijing Institute of Biological Products-República Popular China, y que se aplica en Argentina.
El jefe de Estado estuvo acompañado en la reunión por el canciller Santiago Cafiero y los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; de Río Negro, Arabela Carreras; y de Catamarca Raúl Jalil, entre otros funcionarios que integran la comitiva.
En ese marco, el Presidente analizó que la "experiencia que tuvimos con Sinopharm puede servir para profundizar otros vínculos comerciales, con otro tipo de medicación" y les agradeció "una vez más por contar con ustedes cuando no contábamos con muchos" en la provisión de vacunas.
"Las puertas de la Argentina están abiertas y todo lo que pueda hacer nuestro gobierno por profundizar lazos, vamos a hacerlo", dijo el jefe de Estado argentino.
Negocios que están bajo la mira de EE.UU.
Por otra parte, el Gobierno argentino y su par chino trabajan en tres proyectos de mutuo interés que generan expectativa en el Gobierno, aunque molestias y suspicacias en Estados Unidos.
El primer proyecto tiene que ver con la implementación de la tecnología de 5G en la Argentina. Este nuevo desarrollo, que implicará multiplicar por 10 la velocidad de descarga y transmisión de la información que pasa por los dispositivos electrónicos (y se espera que cambie la manera de comunicarse virtualmente) está causando problemas diplomáticos y tensión entre distintos países por la presencia de Huawei, la megaempresa china, segunda manufacturera mundial de celulares y una de las principales proveedoras de 5G en el planeta.
Las preocupaciones alrededor de Huawei se relacionan con las suspicacias de Occidente con respecto a que el gobierno chino pueda obligar a la empresa a "espiar" o "invadir la privacidad" de los usuarios a través de la nueva tecnología. De acuerdo con información de medios internacionales, la inquietud de Estados Unidos se sostiene en la Ley de Inteligencia Nacional de China de 2017. Establece que las organizaciones civiles deben "apoyar, cooperar y colaborar en el trabajo de inteligencia nacional". Para Joe Biden y otros líderes mundiales, significa que la cúpula de Beijing puede obligar a Huawei a hacer espionaje.
Por este motivo, muchos países como Reino Unido y Australia suspendieron la instalación de la tecnología en sus países. Boris Johnson ordenó que Huawei retire toda su infraestructura, que ya estaba siendo desplegada, antes de 2027. Estados Unidos busca que otros gobiernos sigan estos pasos y evitar el ingreso de Huawei a América Latina. Trascendió que el Consejero de Seguridad Nacional de EE. UU., Jake Sullivan, buscó persuadir a Alberto Fernández para que frene los avances con la empresa china en una reunión el 6 de agosto del año pasado y, en un encuentro posterior con Sergio Massa, habría llegado a ofrecer fondos estadounidenses para que empresas argentinas desarrollen la tecnología, con tal de bloquear inversiones de Huawei.
Sin embargo, el Gobierno dijo que se "busca desplegar esta tecnología lo antes posible" y para ello, mantuvo reuniones con prestadoras nacionales e internacionales, entre las que se encontró Huawei, Ericsson y Nokia, las principales proveedoras. En marzo del año pasado, ENACOM organizó una exposición donde participaron las tres empresas.
La Argentina estaría avanzando en tratativas de implementación con Huawei. Hace menos de un mes, el Gobierno firmó el Plan de Acción Conjunta China-Celac que, entre sus puntos, incluyó uno de "industria y tecnología de la información". Detalla la propuesta de "fortalecer cooperación mutuamente beneficiosa entre gobiernos, empresas e instituciones de investigación en infraestructura digital, equipos de telecomunicaciones, 5G, big data, computación en la nube, inteligencia artificial".
Los progresos en la materia podrían tensar más las relaciones bilaterales con Estados Unidos. "La preocupación nuestra es que Huawei es más que una compañía, tiene relación con el gobierno chino, y la expansión tiene implicancias en términos de inteligencia china y también de presión que puede hacer. No importa el país en el que se desarrolle", advirtió Juan González, asesor de Joe Biden, en su visita a Buenos Aires.
Litio, el "oro blanco"
El segundo acuerdo está vinculado a la explotación de litio. Se trata de uno de los commodities estrella a nivel mundial actualmente porque sirve para fabricar baterías. El "oro blanco", escaso y demandado por la restricción de componentes electrónicos luego de la pandemia, se encuentra en el Noroeste Argentino, que podría contener, según EE.UU., la segunda entre las mayores reservas del mineral en el planeta. Su principal consumidor, China, quiere asegurarse inversiones en la Argentina.
Funcionarios del Gobierno se refirieron a estas "negociaciones" como parte de mejoras para "la electro-movilidad del país" y confirmaron que se encuentra entre el menú de inversiones que Alberto Fernández espera anunciar. Mientras que se encuentra allá, Matías Kulfas, ministro de Desarrollo Productivo, recibió a directivos de la minera Zijin, una firma china, y confirmó ayer que invertirán US$380 millones en la construcción de una planta de explotación en Catamarca. El proyecto "Tres Quebradas" producirá 20.000 toneladas de carbonato de litio por año y comenzaría a funcionar a fines de 2023.
Fuentes oficiales confirmaron que se espera el anuncio de la instalación de una fábrica de baterías de litio y podría concretarse la instalación de Chery, la marca de autos, para la producción de unidades eléctricas en el país.
Atucha III
"Me preocupan los planes para instalar tecnología nuclear no probada china en la Argentina y sus implicaciones para la seguridad regional y la soberanía de la Argentina. Dada la mala experiencia con la estación espacial Las Lajas, Argentina debería dar marcha atrás", manifestó el senador republicano Jim Risch, uno de los principales integrantes de la Comisión de Relaciones Exteriores de la cámara alta estadounidense.
Si bien se trata de un negocio teóricamente cerrado a través de una firma virtual entre el gobierno bonaerense, la empresa Nucleoeléctrica Argentina y la Corporación Nuclear Nacional de China (CNNC), Alberto Fernández busca apalancarse en el acuerdo para hacer un anuncio y buscar más inversiones a nivel energético, vinculadas principalmente a dos represas hidroeléctricas para Santa Cruz.
No es la primera vez que Axel Kiciloff hace un anuncio vinculado a Atucha III. Le tocó cerrar un acuerdo de similares características durante su gestión como ministro de Economía en 2014. Acompañado de Julio De Vido, negoció con la misma empresa con la que firmó hace unos días para la construcción de esta central nuclear. En 2018 el proyecto, ya demorado, se detuvo.