En medio de una creciente preocupación por la propagación del dengue en Argentina, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Ministerio de Salud de la Nación emitieron un comunicado conjunto instando a tomar medidas urgentes para prevenir y controlar la enfermedad. Con más de 57.000 casos reportados y 37 muertes en lo que va del año, la situación demanda una respuesta coordinada y efectiva por parte de las autoridades y la comunidad en general.

El dengue, transmitido por el mosquito Aedes aegypti, se convirtió en una amenaza creciente en la región de las Américas, y Argentina no es la excepción. Los síntomas de esta enfermedad incluyen fiebre, dolor de cabeza intenso, enrojecimiento e inflamación de la piel, entre otros, y en casos graves puede llevar a complicaciones e incluso la muerte. Ante esta situación, la OPS y el Ministerio de Salud han subrayado la importancia de la prevención y el control del mosquito transmisor como piedra angular en la lucha contra el dengue.

El ministro de Salud de la Nación, Mario Russo, enfatizó en la necesidad de un trabajo conjunto con las distintas jurisdicciones afectadas por el brote, manteniendo una sala de situación epidemiológica permanente para monitorear la evolución de la enfermedad. Asimismo, la representante de la OPS en Argentina, Eva Jané Llopis, destacó el apoyo técnico brindado por la organización para abordar y prevenir el dengue, haciendo hincapié en la importancia de la colaboración entre las comunidades y los profesionales de la salud.

Recomendaciones
Una de las medidas clave recomendadas por las autoridades es la eliminación de los criaderos del mosquito Aedes aegypti, tanto en domicilios como en espacios comunes. Esto incluye acciones como tirar recipientes que acumulen agua, limpiar canaletas, tapar contenedores grandes y mantener las piletas de natación cloradas y cubiertas cuando no estén en uso. Además, se aconseja el uso de repelentes como medida de protección individual permanente.


El dilema de la vacuna
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos por contener la epidemia, surge la cuestión de la vacuna contra el dengue. Aprobada por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) en abril de 2023, la vacuna plantea un dilema en cuanto a su inclusión en los programas de inmunización. Si bien su implementación podría ofrecer una herramienta adicional en la lucha contra la enfermedad, su administración presenta desafíos logísticos y su efectividad debe ser cuidadosamente evaluada.

El ministro Russo ha explicado que, tras múltiples revisiones con sociedades científicas y referentes académicos, se concluyó que, en un contexto de brote como el actual, la vacuna no está recomendada como estrategia de Salud Pública debido a su esquema de dos dosis y el tiempo requerido para alcanzar una protección adecuada. No obstante, se continúa evaluando la evidencia científica para determinar la conveniencia de un programa de inmunización en zonas más afectadas.

En este sentido, la estrategia recomendada por el Ministerio de Salud de la Nación y la OPS sigue centrada en la colaboración entre la comunidad y los equipos de salud, así como en el control del mosquito transmisor y la prevención de picaduras. Se hace hincapié en la importancia de una atención oportuna y adecuada de los casos, así como en el compromiso continuo de las comunidades en la lucha contra el dengue y otras enfermedades transmitidas por el mismo mosquito, como el zika y la chikungunya.

La epidemia de dengue en Argentina requiere de una respuesta integral y coordinada por parte de las autoridades y la sociedad en su conjunto. La prevención y el control del mosquito transmisor son fundamentales para contener la propagación de la enfermedad, mientras se continúa evaluando la posibilidad de incorporar la vacuna contra el dengue en los programas de inmunización del país. (El Litoral)