En horas de la mañana de este miércoles, bajo la presidencia del Juez de la Investigación Penal Preparatoria, Dr. Nicolás Stegmayer, se llevó a cabo en los Tribunales de nuestra ciudad, una audiencia imputativa solicitada en su momento por la fiscal Dra. Gabriela Lema. En el banco de los acusados se encontraba un individuo -identificado como Federico R., de 32 años, defendido por la Dra. Giogina Alassia, del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal, quien fue imputado por la representante del Ministerio Público de la Acusación, de un hecho de violencia de género.
Ocurre qué, de acuerdo a lo relatado por la Dra. Lema, la novia del imputado, una menor de edad, lo denunció en su momento por hacerla víctima de agresiones cuando ésta le comunicó que era su intención de cortar la relación que mantenían. En su denuncia formulada oportunamente, la jovencita indicó que el sujeto la había amenazado con una escopeta; además de mencionarle que iba a matar a su madre y luego de ésto se quitaría la vida.
Luego de esos episodios y ante la denuncia presentada, se concretaron allanamientos -tal lo informado de manera amplia por Diario CASTELLANOS- en el domicilio en el que habitaba el imputado, en la localidad de Bella Italia. Esos procedimientos concluyeron con resultados positivos, con el secuestro de una escopeta encontrada debajo de la cama; y por ese motivo la fiscal le atribuyó los delitos de Violencia de género y Tenencia indebida de arma de fuego.
Pero además -tal lo dicho por CASTELLANOS- en el sitio el fiscal de la Sección Especial de Homicidios de la Fiscalía Regional 5, Dr. Martín Castellanos, ordenó la intervención de Policía Científica de la PDI para efectuar diversas diligencias en la vivienda de calle Los Inmigrantes al 2700 de la localidad de Bella Italia. También en algún momento el Dr. Castellano requirió la presencia de Bomberos Zapadores -con su Brigada Canina que está en etapa de adiestramiento- y la Brigada Canina K9 de la ciudad de Rosario a fin de realizar pericias y excavaciones, en búsqueda de restos óseos que podrían pertenecer a pablo R., un hombre de 59 años, tío del actual imputado, sobre quién se emitió una orden de paradero el pasado mes de febrero ya que el hombre había desaparecido y hasta la actualidad nada se supo de él.
Tras dos jornadas de búsqueda de restos humanos en el patio de la vivienda se dieron por concluídas estas acciones y ahora habrá que ver si todo lo relacionado con la desaparición de Pablo R. será una cuestión que deberá seguir investigando la justicia federal de nuestra ciudad.