El secretario de Comercio, Roberto Feletti, adelantó que el índice del mes que acaba de finalizar va a ser negativo y que los controles no alcanzan para bajar los precios. "Milagros uno no hace", expresó.
En medio de la "guerra" contra la inflación anunciada por el presidente Alberto Fernández, el secretario de Comercio, Roberto Feletti, admitió que la inflación de marzo será alta y señaló que no alcanza con el control de precios.
"El índice de marzo va a dar mal. Ahí hay mucho impacto de la guerra, mucho impacto en los productos de harina. Eso va a pegar mucho y es lo que más me preocupa en alimentos", expresó el funcionario, quien fijó un techo para el pan en $ 270 por 90 días, luego de reunirse a principios de esta semana con varios referentes del sector.
En ese sentido, el responsable de administrar los controles de precios señaló en Radio Con Vos que "no bajan sólo con regulación; se pueden contener, que es lo que estamos haciendo ahora".
Respecto a las medidas que puede tomar el Gobierno para mejorar esta situación o buscar alguna respuesta, aseguró: "Milagros uno no hace".
Las consultoras privadas estiman que este mes el costo de vida se acerca peligrosamente al 6%, Feletti remarcó que "para tener una economía con expansión sostenida y una tendencia de precios estable, lo tenemos que hacer con acumulación de reservas en el Banco Central".
"Lo nuestro es microeconómico. Es trabajar en precios y costos de las empresas, y pedir apropiaciones monopólicas. También luchar porque los precios internacionales, que hoy están muy suba, no impacten en precios internos sobre todo en insumos para alimentos como trigo, maiz y girasol", explicó sobre el trabajo de su cartera, en medio de las subas internacionales de las materias primas registradas tras la invasión de Rusia a Ucrania.
Y admitió que si fuera por él, tanto "trigo, girasol y maíz tendrían que tener niveles de retenciones más altas".
En ese aspecto, consideró: "El pueblo argentino tiene que tener en cuenta que nosotros no podemos convalidar un efecto riqueza, que alguien porque acopio trigo, ese producto, de pronto, se duplica o se sube un 70% en dólares y eso efecto riqueza se traslada al pan y lo pague la población. No es plausible es una sociedad armónica. Eso tiene que ser tenido en cuenta y neutralizar ese efecto riqueza".
"La retención es un efecto regulatorio. En el Gobierno de Néstor y Cristina, el nivel de retenciones con precios internacional más bajos, era más alto. Y nadie perdió plata", sentenció.
Y planteó que hay dos tipos de inflación: "La monopólica que intervenimos en las góndolas, y la internacional que es el desacople que se materializa a través de las retenciones. En ese marco, discutimos. Ahora, milagros uno no hace".
Si bien dijo que tiene "buen diálogo" con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y que cuenta con "mucho respaldo" del ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; Feletti reconoció: "Es cierto que el Estado debería tener más herramientas en términos de regulación. Ahora, la secretaría aplica todas las que tiene al alcance de la mano, es decir, desde el monitoreo diario hasta las herramientas que les dan las leyes".
Acuerdo con el FMI
Por otra parte, se refirió al acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional aprobado en el Congreso, sobre el que manifestó que si fuera diputado, lo hubiera votado. "Pero nadie puede estar feliz ni estar de acuerdo con un esquema de corset monetario y fiscal", indicó.
En ese sentido, insistió que para "estabilizar la economía desde el costado monetario y fiscal, se va a fracasar" por lo que "lo único que asegura el piso de estabilidad es que el Banco Central atesoren reservas".
"Llegamos a una instancia que era default o acuerdo y no puedo oponerme a las políticas oficialistas", concluyó.