Con un volumen de casi 10 mil cabezas ofertadas, Rosgan realizó una subasta desde el predio de la Sociedad Rural Argentina. El encuentro fue transmitido por streaming el 30 de julio. En esta oportunidad, el remate funcionó de forma presencial con la mitad de los consignatarios en el predio y el resto de las firmas de manera online, desde distintos puntos del país.
En cuanto a los valores promedios de cada categoría, se obtuvieron: terneros $ 234,94, novillos de 1 a 2 años $ 206,54, terneros y terneras $ 220,55. También en terneras $ 212,49, novillos Holando $ 146, vacas de invernada $ 117,69, vacas con garantía de preñez $ 58.846,15, vaquillonas de 1 a 2 años $ 203,29.

"La invernada sigue firme"

Según el director ejecutivo de Rosgan, Raúl Milano, el remate mostró como "la invernada sigue firme" más allá de los avatares del sector con cierres temporarios o parciales de exportación.
"Como reserva de valor en momentos de alta inflación, es una categoría que le permite al productor conservar su capital", indicó el reconocido asesor ganadero. Además, sostuvo que nuevamente la vaca de invernada "volvió a tener clientes para su colocación". Es que reaparecieron los frigoríficos para comprar, pujando con el invernador tradicional.
Por su parte, uno de los consignatarios que estuvo presente en el remate fue Patricio Carli de Alzaga Unzue. "Al remate lo vimos con optimismo. Es el 7° que hacemos desde la Sociedad Rural de Palermo con la diferencia, que este año la muestra no está. Sin embargo, creemos que con la calidad de la hacienda que tenemos y la necesidad de invernada, los valores que obtuvimos fueron muy buenos", manifestó.

«El comprador está restringido"

Maximiliano Farquharson, de la firma Gananor Pujol, sostuvo que la hacienda gorda no está ayudando por el problema de la exportación. "Esto hace que el comprador se retraiga un poco. Pero hay que destacar que los productores están acompañando muy bien y apostando como lo hace siempre la ganadería", destacó.
En tanto, Luciano Colombo, de la casa consignataria Colombo y Colombo, mostró su satisfacción por los números del remate. "La ganadería es una pasión. Se trata de personas que tienen su propia idiosincrasia y es un ambiente de mucho respeto a la palabra, a la naturaleza, y al trabajo diario", dijo el consignatario.
En ese sentido, expresó que les fue muy bien en el remate. "Nos fuimos satisfechos con lo realizado y felices de haber estado presentes en esta subasta", aseguró Colombo.