Por Luis Ciucci

Santa Fe, las precipitaciones complicaron la cosecha y beneficiaron la siembra. El informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, correspondiente al período comprendido entre el 8 y 14 de noviembre que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe, señala que el proceso de siembra de la cosecha gruesa 2023-2024 se intensificó a medida que los pisos de los lotes lo permitieron, dada la buena a muy buena disponibilidad de agua útil en la cama de siembra. La situación se interrumpió según las distintas zonas por las lluvias de variadas intensidades e irregulares montos pluvimétricos que se concretaron y regularon las actividades agrícolas. Para el lapso comprendido entre el 15 y el 21 de noviembre, los pronósticos prevén, desde su comienzo, inestabilidad climática parcial a totalmente cubierto, altas probabilidades de precipitaciones, variadas intensidades, como montos pluvimétricos, como irregular distribución geográfica con el transcurso de los días alternaría en periodos estables y soleados. A posteriori, variaría a condición de estabilidad o en tiempo con sol y paulatino aumento de las temperaturas diarias. En lo que hace al trigo, las estables condiciones ambientales que reinaron desde que se inició la semana, posibilitaron el avance de la cosecha de trigo en forma constante y con buen ritmo en el territorio de la provincia de Santa Fe. En cuanto al girasol, un bajo porcentaje de ellos fue afectado por la falta de humedad en los perfiles de los suelos en inicio del ciclo y además influyó la falta de oportunas fertilizaciones por lo que no se recuperaron. Las futuras condiciones ambientales, posibles y abundantes precipitaciones, días nublados, afectarían el desarrollo de la oleaginosa en la etapa de floración por lavado directo del polen, como así también el trabajo de los polinizadores, principalmente abejas. En lo que hace al maíz temprano, se encontró a los manizales de primera en estado bueno a muy bueno y con cultivadores excelentes que aprovecharon los abundantes contenidos de humedad en los suelos. En el área de estudio se observaron dos zonas bien diferenciadas. Por un lado, en el noreste de estudio, las implantaciones se realizaron en la ventana óptima de siembra y fueron beneficiadas por las lluvias. El cereal prosiguió su normal desarrollo en las etapas fenológicas propias de cada parcela. En el resto de la superficie de estudio, las escasas a nulas disponibilidades de agua útil en la escama de siembra obligaron a un ocurrimiento o desfasaje de 25 a 30 días de la fecha ideal, principalmente en el área de influencia de las cuencas lecheras. En cuanto al algodón, con alternancia de periodos inestables y estables, avanzó el proceso de siembra del cultivo que se había retrasado por el elevado contenido de humedad de los suelos. Se observó a los algodonales en estado bueno a muy bueno, con cultivadores excelentes que aprovecharon satisfactoriamente las condiciones ambientales, según datos que dio a conocer la Bolsa de Comercio de Santa Fe.