19.30 El celador de la Unidad Penitenciaria N° 2 escuchó ruidos en el Pabellón 1 y dio la alarma. Ocurrió el viernes, minutos previos al partido de la Selección Argentina contra Países Bajos.

Fue cuando un suboficial del Servicio Penitenciario escuchó ruidos repetitivos provenientes del pabellón I. Detuvo su andar y percibió los mismos sonidos, mecánicamente articulados, como si se estuviera rompiendo una pared.
De inmediato se dirigió hasta las celdas 115 y 117 y allí confirmó su presunción. Apenas unos segundos le tomó convocar a los oficiales y suboficiales del Grupo Operativo de Restablecimiento del Orden (GORO), quienes al investigar descubrieron un foso de grandes dimensiones con tres teléfonos celulares en el interior, que fueron secuestrados.
Tras separar y desalojar a los internos involucrados en la maniobra, fueron denunciados a la Fiscalía en turno como presuntos autores de los delitos de destrucción de bienes del Estado y tenencia de elementos prohibidos (teléfonos celulares).
Cuando se revisó la celda 115 habitada por dos presos, se descubrió un socavón en el piso de importantes dimensiones: 1,50 metro de largo por 0,50 de ancho. Debajo hallaron tres teléfonos celulares y un orificio que comunicaba con la celda 116 habitada por otros dos internos, y que comunicaba con la siguiente: la 117, la última actualmente deshabitada.
Los cuatro internos ocupantes de esas celdas fueron separados rápidamente del pabellón I de la Unidad II de Las Flores. Lo que siguió fue un detallado relevamiento que realizó el personal de oficiales y de suboficiales penitenciarios, que además de las roturas descubiertas, establecieron que esa punta del pabellón I automáticamente hubiera puesto a una cantidad de internos no determinada muy cerca del paredón oeste que da a metros de la avenida Cafferata para una probable fuga masiva de presos, que quedó completamente abortada.
Todos los internos que fueron desalojados de sus celdas fueron trasladados y revisados por médicos del Servicio Penitenciario que constataron su buen estado de salud, mientras personal de Logística y de Servicios Generales de Mantenimiento comenzó a rellenar con hormigón armado los agujeros y fosas hechas por los presos.

Más muertes en Rosario

En la noche del sábado 10 de diciembre, dos personas fueron asesinadas, una en el noroeste de la ciudad gobernada por Pablo Javkin y la restante en el noroeste de Villa Gobernador Gálvez, alcanzando el récord de 271 crímenes en un año.
En inmediaciones de Sartre y Pasaje 1655, a pocas cuadras del estadio Mundialista de Hockey, un joven de 20 años era asesinado en el marco de una balacera perpetrada por al menos una persona en moto.
Fuentes policiales y judiciales indicaron que la víctima, identificada como Jhon Ayrton Cartazo, estaba junto a varias personas en una esquina del barrio conocido como Antártida Argentina, cuando un sicario en moto apareció y, prácticamente sin mediar palabra, comenzó a disparar contra el grupo.
Como consecuencia de los disparos, Cartazo recibió varios impactos en distintas partes del cuerpo; mientras que Roxana G., de 30 años, fue alcanzada por un proyectil en una pierna y Victoria C., de 11 años, fue herida en ambas piernas. Todos fueron llevados en autos hasta el policlínico San Martín, el más cercano al lugar del ataque, donde Cartazo llegó sin signos vitales y pese a las tareas de resucitación cardio pulmonar, falleció. La mujer de 30 años recibió curaciones y se retiró, mientras que la menor fue trasladada al hospital de niños para una mejor atención.
Personal del gabinete criminalístico y de la división homicidios de la Agencia de Investigación Criminal realizó un relevamiento de la escena del hecho, levantamiento de rastros y toma de testimonios a vecinos de la zona para intentar dilucidar la mecánica y motivación del hecho y dar con el autor del ataque, que por el momento no está identificado.

En Villa Gobernador Gálvez

En una vivienda ubicada en General Mosconi al 2400, de barrio Coronel Aguirre, al noroeste de Villa Gobernador Gálvez, un hombre de 31 años era asesinado de múltiples disparos de arma de fuego.
El violento episodio, que se ha repetido varias veces este año en distintas partes del departamento Rosario, ocurrió alrededor de las 23:15 hs del sábado, cuando una persona por el momento no identificada llegó hasta la vivienda donde residía Brian Ciuffo, de 31 años y al parecer sin mediar palabras, le disparó desde muy corta distancia.
El hombre recibió varios impactos en el tórax y quedó tendido en el piso, mientras que el atacante se dio a la fuga.
Vecinos de la zona denunciaron el ataque al sistema 911 y al rato llegó hasta el lugar personal policial y médico. Una ambulancia trasladó al hombre hasta el Hospital de emergencias "Clemente Álvarez", donde llegó sin vida.

Paridad

Con estos dos nuevos crímenes en el departamento Rosario, en base a datos propios y al informe que genera en forma periódica, desde 2014, la Dirección de Política Criminal de la Secretaría de Política Criminal y Derechos Humanos, Fiscalía General, la Subsecretaría del Observatorio de Seguridad Pública y la Subsecretaría de Prevención y Control Urbano del Ministerio de Seguridad, ya se llevan registrados 9 crímenes en los primeros 10 días del mes de diciembre y un total de 271 en lo que va del año en todo el departamento, incluyendo crímenes en Villa Gobernador Gálvez, Granadero Baigorria, Ibarlucea, Pérez, Alvear, Arroyo Seco, Funes y Soldini.
La cantidad de homicidios superó a los registrados entre 2014 (cuando comenzó el Nuevo Sistema de Justicia Penal) y 2021 y a 20 días de finalizar el año 2022, ya alcanzó el triste y violento récord de 2013, cuando se desató una larga venganza tras el asesinato de Claudio Ariel "Pájaro" Cantero, por entonces líder la banda Los Monos. Ese año se registraron 271 asesinatos en todo el departamento Rosario, 264 de esas muertes en su ciudad más importante.