Una nueva semana comienza para todos, con la rutina y quehaceres de cada uno, pero para Pedro y su familia no es una semana más, sino el inicio de un nuevo largo camino por afrontar. Pedro es el niño de 7 años, ya un "famoso" de nuestra ciudad, que a fines del mes de julio recibió un implante coclear, siendo el primero que se coloca en el Hospital local.
Este implante es un dispositivo electrónico que se le colocó dentro de la cabeza le permitirá mejorar su calidad de vida, ya que el niño hace más de dos años había perdido por completo la audición de su oído izquierdo.
La operación fue el 27 de julio y si bien salió todo exitosamente, todavía no se sabe si el "aparatito" -como lo llama el niño- funcionará correctamente porque todavía no fue encendido. Eso es porque primero debía asentarse, cicatrizar y una vez que este firme, se procederá a prender. La fecha estimada era el 25 de agosto, pero finalmente se definió que será hoy. Será el primer día de una larga lucha que deberán afrontar Pedro y su familia, pero con la confianza y esperanza de que saldrá todo bien y el niño podrá escuchar con los dos oídos.
La familia viajó hoy a Buenos Aires para encontrarse con el médico que lo operó, el Dr. Diego Gutiérrez, un otorrinolaringólogo rafaelino que trabaja allí, pero que vino especialmente hasta su ciudad natal para operarlo.
En la previa, Diario CASTELLANOS dialogó una vez más con el protagonista y su mamá, Florencia, para saber cómo se prepararon y cuáles son las expectativas. Por su parte, Pedro contó que está muy ansioso por viajar, con muchas ganas, aunque reconoció que está muy nervioso por saber si ya va a poder escuchar.
Ante la consulta sobre qué se imagina que pasará cuando prendan el implante, indicó que sentirá que va a "volver a ser una persona normal que no tiene ningún aparato. Voy a escuchar mejor".
Para ayudar a calmar esos nervios, contó que se llevará juguetes, su almohada, el celular para mirar dibujitos y también papel y colores para dibujar, para poder pasar el tiempo y divertirse.
Para la vuelta, luego de que prendan el implante, Pedro contó que lo primero que quiere hacer es "invitar a dos amiguitos para ir al parque, a la heladería y comprar figuritas", dijo ilusionado. Cabe destacar que en todo este tiempo el niño pudo salir muy poco porque debía protegerse de posibles golpes, por eso sus ganas de disfrutar el aire libre.
En cuanto a la familia, su mamá contó que ella está "muy tranquila y confiada en que el encendido y la rehabilitación van a ser positivos. Venimos trabajando con Clarisa, terapeuta auditiva, desde hace casi un año que nos viene acompañando y capacitando, no sólo a Pedro sino a los que convivimos en el día a día con él. Además Pedro está super predispuesto a las terapias porque quiere volver a oír", detalló.
Como mencionó Florencia, no se trata sólo de este viaje, porque ahora deberán afrontar todo un proceso de rehabilitación con distintas profesionales. "Ahora vamos por dos sesiones pero seguiremos trabajando hasta diciembre, como mínimo tres veces por semana para entrenar y calibrar el oído y que Pedro se adapte lo mejor posible", contó.
Asimismo, manifestó que sus expectativas apuntan a "que todo salga tan bien como ahora, que vuelva a oír y poder decir lo hicimos, hemos mejorado su calidad de vida".
"Para Pedro va a ser super positivo, va a mejorar en su fonética y va a escuchar esos sonidos que muchas veces uno disfruta, como los cantos de algún pajarito, o se va a dar cuenta que está pasando un avión por encima nuestro. Va a comenzar a percibir esos detalles que hoy se pierde y obviamente va a repercutir de buena manera en su educación, va a poder prestar más atención y hasta quizá le empieza a gustar más lengua y literatura, que ahora le cuesta bastante", cerró, entre risas.
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