Por Anabella Bettello

Ingredientes

Para caramelo líquido:

· 200 g. de azúcar blanca

· 150 ml. de agua y 4 cucharadas de agua

· 1 cucharada de jugo de limón recién exprimido

Para hacer caramelo normal, semisólido:

· 100 g. de azúcar blanquilla

· 3 cucharadas de agua

· 1 cucharadita de jugo de limón recién exprimido

Preparación del caramelo líquido

· Ponemos a calentar un vaso de agua en una olla.

· En otra sartén, mejor si tiene fondo más grueso, añadimos el azúcar, 4 cucharadas de agua y una de jugo de limón (nuestro aromatizante). Ponemos la sartén a temperatura media y dejamos que se caliente. No hace falta que lo toques al principio, dejamos que se empiecen a formar burbujitas. No hay prisa, es caramelo y necesita tiempo.

· Cuando el azúcar y el agua se junten va a cambiar de color a un tono miel clarito. Es ahí cuando tenés que prestar atención para que no se queme el caramelo, bajar la temperatura o incluso apagar el fuego y empezar a remover con una espátula que aguante temperaturas altas.

· Recorda, si el caramelo se vuelve muy oscuro, se torna amargo y no nos va a servir para nada. Lo bueno de hacer caramelo en casa es que podemos controlar el punto de tostado según el gusto de casa, más rubio clarito o más bien oscuro.

· Así que cuando el caramelo tenga ese color dorado miel tal como vez en la foto de presentación, añadimos una cuchara con el agua del otro recipiente y lo vertemos sobre el caramelo. Aquí es donde les recomiendo el tema de poner un guante de cocina, ya que puede saltar o salir vapor muy caliente.

· A continuación vamos añadiendo el resto del agua del recipiente removiendo poco a poco y mezclando bien. Cuando veas que se han unido perfectamente dejamos enfriar. Y cuando digo enfriar, no se les ocurra meter el dedo para ver si está frío, ya que las quemaduras por caramelo son terribles.